Un hotel reformado que vuelve a convertirse en uno de los mejores hoteles de América Latina. Maroma, A Belmond Hotel, Riviera Maya. Diseñado con la inspiración de los artesanos de México, es acogedor como pocos, desde los suelos hasta los muebles con un gusto internacional, pero fiel a las tradiciones y la cultura maya. El talento de los artesanos al servicio de una estética espectacular en telas, arcilla y piedras crean un ambiente único y excepcional.
En decoración, se hace presente el gusto exquisito de Tara Bernerd y su estudio de arquitectura interior que ha rescatado mucho de lo mejor de los artesanos de México. Respeto a la naturaleza, plastic free, y refinamiento desde las servilletas de hilo hasta las sombrillas de la playa. Habitaciones espaciosas, frente a una de las mejores playas de la Riviera Maya, tranquila, sosegada, lejos del bullicio de Cancún. Un trocito de paraíso.
Nos da la bienvenida un horizonte de mar turquesa, palme- ras y una alberca inspirada en los míticos cenotes capaces de limpiar el alma, en un marco de un jardín tropical donde descansar plácidamente. Atención a todos los detalles, uniformes creados a medida por Collectiva Concepción y cosidos a mano, muebles tallados, más de 700 mil losetas pintadas a mano por José Noé Suro, ceramista y coleccionista, un barro que da magia al suelo en cada habitación. Hasta la cristalería es personalizada para el hotel. En la terraza nos espera el sonido de las olas.
La gastronomía es otro detalle destacado del hotel gracias a la labor del chef Daniel Camacho, que hace del desayuno una fiesta de la imaginación, la comida un homenaje al mar, a Oaxaca y Yucatán con respeto a la sostenibilidad. Por si faltaba algo, el fuego y las brasas mágicas de Curtis Stone, en el restaurante Woodend, con pescados y carnes, ofrece una cocina abierta de muy alto nivel del experto chef australiano.
No podía faltar un excelente nivel de mixología. Woodend ya figura entre los mejores restaurantes de hotel de todo México, con una interesante propuesta de vinos. Más detalles que invitan al placer y la serenidad, los encontramos en el Spa Maroma by Guerlain, el primero de la prestigiosa firma en América Latina. Una experiencia casi religiosa con unos aromas de alta gama y un equipo de profesionales capaces de proporcionar un descanso inolvidable. Experiencias de meditación, yoga, talleres de biótica, excursiones por el universo maya o la práctica del golf son parte de las propuestas del hotel. Un paraíso que una vez que lo conoces querrás regresar.
El escenario ofrece la mejor versión del caribe mexicano. La elegancia de las estancias une la cultural de lujo de LVMH, grupo líder absoluto en lujo, con la belleza de la artesanía local, el México Mágico está presente en cada rincón, con una elegancia universal. El servicio también es parte de este tesoro de la hospitalidad. El hotel ha vivido una reforma de dos años hasta convertirse en este lugar tan especial, donde conviven la serenidad con el espíritu festivo, la calma con la aventura y el deporte junto a la selva tropical que rodea a esta playa de arena blanca y aguas turquesas. Un lugar que no quieres abandonar y cuyo recuerdo maravilloso es difícil de olvidar.
