Los baby boomers son aquellos nacidos entre 1946 y 1964, es decir, los que actualmente tienen entre 59 y 77 años. Se trata de un segmento con un gran potencial para el turismo, ya que dispone de tiempo libre, poder adquisitivo y ganas de viajar. Según el informe “Turismo Senior en España 2020” elaborado por Braintrust, este colectivo representa el 21% de la población española y el 30% del gasto turístico.

En esta generación se caracterizan por ser viajeros experimentados, que buscan calidad, comodidad y seguridad en sus viajes. Les gusta conocer nuevos lugares, culturas y gastronomías, pero también repetir destinos que les han gustado o que tienen un valor sentimental para ellos. Prefieren viajar en pareja, con amigos o en grupos organizados, y suelen planificar sus viajes con antelación, utilizando tanto canales online como offline.

Los destinos preferidos por los baby boomers son los de costa e islas, tanto nacionales como internacionales, seguidos de los circuitos culturales por España y Europa. También muestran interés por los viajes de naturaleza, salud y bienestar, así como por los cruceros. Dentro de España, los destinos más demandados por este segmento son Andalucía, Cataluña, Comunidad Valenciana, Canarias y Baleares.

El segmento de edad más elevada dentro de esta generación se encuadra dentro del turismo senior, que disfruta del programa social del Imserso, con viajes subvencionados a personas mayores de 65 años o pensionistas

En la actualidad disponde de una oferta de unas 900.000 plazas anuales, repartidas en tres lotes: costa peninsular, islas y turismo de interior. La fuerte demanda para este programa que ha contado con 886.000 plazas para la temporada 2023-2024, hace que resulten insuficientes. Ante esta situación, algunas empresas turísticas están refornzando sus alternativas al Imserso, ofreciendo productos similares o complementarios al público senior.

Entre ellas, destaca Club de Vacaciones, por ser la más veterana en aventurarse en este segmento poblacional, aunque también destaca Mundosenior y en 2023 se han incorporado Mundiplan -tras no lograr ninguno de los tres lotes del concurso público- y Newblue (W2M). Todos ellos compiten por un pedazo del pastel cada vez más grande, dado que esta generación es muy numerosa y se seguirá jubilando a lo largo de la presente década.

La generación X está formada por las personas nacidas entre 1965 y 1980, que tienen entre 43 y 58 años en 2023. Se trata de una generación que vivió la crisis económica, el paro, la precariedad, la reconversión y la competencia en España, y que se adaptó al cambio tecnológico, social y cultural en los años 2000 y 2010. Son los adaptadores del turismo, que han viajado en función de sus circunstancias y que han incorporado las nuevas tendencias y herramientas del sector.

La generación X se caracteriza por ser pragmática, equilibrada, versátil y resiliente. Les gusta combinar diferentes tipos de destinos en función de sus circunstancias y que han incorporado las nuevas tendencias y herramientas del sector

Los viajeros de la generación X se caracterizan por ser pragmáticos, equilibrados, versátiles y resilientes. Les gusta combinar diferentes tipos de destinos, tanto nacionales como internacionales, y los viajes mixtos, con opciones de ocio y trabajo. Buscan la calidad, la eficiencia, la comodidad y la satisfacción. Valoran la familia, los amigos, la salud y el bienestar. Son usuarios avanzados de la tecnología, pero no adictos a ella. Prefieren la información, la opinión y la recomendación.

El reto para el turismo español es diversificar la demanda para esta generación, que representa un segmento de gran tamaño, con responsabilidades familiares y profesionales y con necesidades diversas. Para ello, es necesario ofrecerles productos flexibles, que les permitan adaptar sus viajes a sus preferencias, presupuestos, tiempos y acompañantes. Para ellos, se créan productos de turismo familiar, de negocios, de salud o de escapadas, que les facilitan la planificación, la reserva y la gestión de sus viajes.

La oportunidad para el sector turístico español es aprovechar la fidelidad de esta generación, que puede generar un flujo constante de ingresos y de reputación para el sector y para los destinos. Por ejemplo, se podrían crear programas de turismo de repetición, que les permitan volver a los lugares que ya conocen, disfrutar de los servicios que ya les gustan, beneficiarse de las ventajas que ya les ofrecen y compartir sus experiencias con otros viajeros, especialmente con los más jóvenes, tal como apunta el Multigenerational Travel Report 2023/2024, elaborado por Mintel.

Los millennials son aquellos nacidos entre 1981 y 1996, es decir, los que actualmente tienen entre 27 y 42 años. La generación Z son los nacidos entre 1997 y 2010, es decir, los que tienen entre 13 y 26 años. Ambos segmentos representan el futuro del turismo, ya que son los que más viajan y más influencia tienen en las decisiones de compra de sus familias.

Los millennials y la generación Z se caracterizan por ser nativos digitales, que utilizan internet y las redes sociales como principales fuentes de información e ins- piración para sus viajes. Son viajeros independientes, que diseñan sus propios itinerarios y reservan sus servicios sueltos a través de plataformas online, sin recurrir a intermediarios. Buscan experiencias auténticas, personalizadas y sostenibles, que les permitan conocer la realidad de los destinos, interactuar con la población local y contribuir al desarrollo de las comunidades.

Según el informe “NextGen: Jóvenes, redes sociales y nuevas formas de viajar” elaborado por el Máster de Periodismo de Viajes de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) y la empresa IATI Seguros, los jóvenes españoles realizan una media de 2,8 viajes al año, a los que destinan un presupuesto medio de 683 euros. Entre las principales motivaciones para elegir un destino, el 83% destaca su interés por conocer un lugar nuevo, el 60% la recomendación de amigos y familiares, y el 42% la información que ha visto en internet, según señala un informe de Deloitte.

La generación alfa, los futuros viajeros, son las personas nacidas a partir de 2011, que tienen entre 0 y 10 años en 2023. Se trata de una generación que ha nacido en un mundo digital, global y cambiante, que les ofrece infinitas posibilidades de aprendizaje, comunicación y entretenimiento. Son los hijos de los millenials y de la generación X, y serán los más formados, creativos y emprendedores de la historia. Tendrán más movilidad y cambio constante, y renunciarán a aspectos como su privacidad. Serán más conscientes de los problemas sociales y ambientales, y buscarán soluciones innovadoras.

Los cambios demográficos que se están produciendo en la sociedad española su- ponen un reto para el sector turístico, que debe adaptarse a las preferencias y necesidades de las nuevas generaciones de viajeros. Para ello, es necesario conocer en profundidad sus características, comportamientos y expectativas, así como ofrecerles productos y servicios que respondan a sus demandas.

Además de las distintas generaciones, con sus correspondientes hábitos viajeros, hay que tomar en consideración también otros colectivos que afectan a los viajes al margen de la generación a la que pertenezcan. Un caso llamativo son los ‘dinkis’, acrónimo anglosajón de ‘dual income, no kids’ (dos sueldos, no hijos), que se aplica a parejas que han escogido aprovechar sus ingresos para viajar de forma continuada en lugar de tener descendencia.

El perfil del dinki corresponde a dos adultos de más de 30 años con ingresos, sin cargas familiares, y dispuestos a consumir turismo. Es una de tantas tendencias que llegó con el nuevo milenio y que está en progresión. Se apoya en el hecho de que tener hijos es caro y limita para realizar actividades.

Y, aunque los dos años que duró la pandemia han supuesto sin duda una contención para estos viajeros compulsivos, son parte de aquellos que se están resarciendo en la actualidad. La agencia Habits señala que el 15% de los hogares en España (2,8 millones) podría catalogarse como dink, 2,1 puntos más que en 2019.