Cada vez es más común observar que sitios de la ciudad con poca plusvalía se convierten poco a poco en zonas residenciales, en donde se impulsa la construcción de viviendas, negocios y se fomenta la inversión. Y, si bien esto pareciera beneficiar la economía local, diversos estudios han revelado que detrás de esto subyace el problema de la gentrificación, el cual afecta gravemente a la población de un sitio determinado.

El término de gentrificación se concibió alrededor del siglo XX, por Ruth Glass, cuando en Inglaterra y otros lugares de Europa comenzó la transformación de clase. Esto ocasiono el desplazamiento de las clases obreras situadas en las áreas centrales con la aparición de nuevas edificaciones e infraestructuras modernas,

Y desde entonces los investigadores discuten esta problemática social, política, económica y cultural debido a los daños que ocasiona en los sectores menos privilegiados de la población.

¿Qué es la gentrificación?

De manera general podemos concebir la gentrificación como una poderosa fuerza de cambio económico en las ciudades, que generalmente viene acompañada del desplazamiento extremo e innecesario de grupos vulnerables. Este fenómeno incrementa el precio de las propiedades en áreas que sufrieron una prolongada falta de inversión, aumentando las rentas y el valor de las viviendas y propiedades.

El geógrafo Luis Alberto Salinas Arreortua, investigador de la UNAM, menciona que se trata de un proceso de reestructuración de relaciones en el espacio. Él hace referencia a que los sectores con mayor capacidad económica se apropian de espacios urbanos que presentan características deseables: buena ubicación, áreas verdes, infraestructura, zonas culturales; pero que generalmente son considerados de “clase baja”.

Cuando inicia la gentrificación, estos barrios atraen inversión de capitales inmobiliarios que construyen inmuebles para gente de ingresos medios y altos. Sin embargo, esto ocasiona que los habitantes anteriores no puedan permanecer en su residencia, debido al incremento en los costos de la zona.

¿Cómo afecta a la economía este fenómeno?

El incremento de los precios en zonas anteriormente vulnerables ocasiona que se reduzca la oferta de viviendas asequibles, por lo que los residentes existentes se ven desplazados de sus hogares. Esto impide que la clase baja se beneficie del crecimiento económico que hay en la zona, así como de la mayor disponibilidad de servicios.

En el caso de México, vemos que este fenómeno se agravó debido a la llegada de nómadas digitales, es decir, grupos que migran de Estados Unidos u otros países con mayor ingreso económico, para trabajar a distancia; los cuales se asientan en las partes más “trendy” de las ciudades más grandes del país, aprovechándose de los precios bajos de la zona y desplazando a las comunidades que habitaban en el sitio.

Así, aquellos que deben salir de las zonas conurbadas a regiones periféricas se enfrentan a problemas de movilidad, experimentan carencias de servicios básicos como agua y drenaje; y en muchas ocasiones no pueden adquirir viviendas de interés social debido a la lejanía con sus centros laborales.

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